Reembolso del mes de garantía, revisión de cláusulas y costos extras asociados a reparaciones son parte del panorama que enfrentan miles de chilenos al momento de entregar un inmueble y dar término a un contrato arriendo. Expertos en gestión inmobiliaria explican qué aspectos considerar en el proceso de check in (ingreso) y check out (salida) de una propiedad para evitar malos entendidos.
El arriendo es una tendencia que ha tomado fuerza en el país, tanto desde los inversionistas, que gozan de las rentabilidades como para los arrendatarios que buscan soluciones habitacionales acotadas a su presupuesto. Uno de los aspectos que más genera confusión en esta relación son las cláusulas y condiciones de entrega de un inmueble.
Para el socio y director comercial de Assetplan – administradora experta en gestión inmobiliaria con más de 8 mil departamentos en Chile – Ignacio Torretti, el contrato de arriendo es un instrumento que ayuda a establecer las condiciones entre ambas partes, sin la necesidad de un ente regulador “en el cual el propietario puede establecer las condiciones que desee sin la existencia de un organismo que lo regule. Por ello es importante que el arrendatario cuente con la asesoría de empresas de prestigio que le permitan estar resguardado ante cualquier tipo de inconvenientes”.
Antes del proceso de arriendo, las personas suelen evaluar aspectos como la ubicación, conectividad, y los costos asociados de arriendo y gastos comunes. Sin embargo, el abandono de un inmueble puede ser un verdadero dolor de cabeza si no se conoce bien los conceptos acordados en el contrato. Uno de ellos es el pago de la garantía, vital para el proceso de salida de un inmueble. El experto de Assetplan explica que este concepto “existe para cubrir los deterioros o perjuicios que haya sufrido el inmueble, o bien, para cancelar los días proporcionales de arriendo que hayan quedado pendientes y cuentas de servicios básicos morosas al momento de abandonar una propiedad. Por tanto, ésta no se devuelve en caso de que los daños y gastos sean mayores al monto de la garantía”.
“Al momento de entregar un recinto habitacional, el arrendatario tiene el deber de entregarlo en las mismas condiciones en las que se arrendó. Si esto ocurre, tiene derecho a la devolución de su garantía en los plazos estipulados en el contrato, una vez descontado los gastos asociados a reparaciones, las cuales deben tener un precio justo, junto con el derecho a que no se ingresen costos por el uso legítimo y el desgaste normal del inmueble”, agrega Torretti.
Entonces, ¿Qué hacer para evitar inconvenientes? Para Ignacio Torretti de Assetplan la asesoría adecuada es vital para culminar la relación contractual. Por otro lado, sugiere revisar detenidamente que todas las cuentas del inmueble se encuentren pagadas y contar con los comprobantes respectivos. Junto con esto, asegurarse que el departamento esté funcionando en óptimas condiciones y sin desperfectos.
La transparencia en el proceso es otro aspecto relevante para el término de un contrato de arriendo. En este sentido, propuestas como las de Assetplan ofrecen que al momento de hacer el proceso de check out (devolución de la propiedad) se firma un documento que establece, de manera previa, el monto a devolver por conceptos de garantías, el cual se entrega en un plazo de 10 días desde la entrega del inmueble.
¿Con cuanto tiempo se puede pedir el abandono de una propiedad? El experto enfatiza que este proceso debe estar estipulado en el contrato de arriendo, “si bien, la norma general indica que ambas partes pueden poner fin al contrato avisando con 60 días de anticipación a la fecha de término. Un cierre anticipado puede establecer multas, las cuales suelen quedar estipuladas en el mismo documento. Por ello, para garantizar que este proceso sea justo para ambas partes es recomendable arrendar con una compañía seria, la cual garantice tanto los derechos del arrendatario como del propietario”, puntualiza Torretti.