Un montacargas es un aparato fundamental si hablamos del mundo industrial. Sin embargo, hablar de ellos puede ser mucho más complejo de lo que se cree, pues existen muchas características y tipos que pueden complicar elegir el más adecuado si hablamos de rentabilidad, precio y eficiencia. A continuación, te contamos lo que debes saber al respecto:
Un montacargas es un aparato que sirve para elevar y/o transportar material o personas. El mismo se compone de una plataforma deslizable a través de guías metálicas que se disponen para ello.
Este movimiento se logra gracias a un cabrestante que opera por medio de un cable de acero y una roldana de retroceso que se ubica en la zona más alta de la carrera. Este complejo sistema es equilibrado por un contrapeso que se dispone en un extremo del cable.
En la actualidad, los modelos que se encuentran disponibles en el mercado tienen mecanismos de seguridad que logran el frenado de manera automática si por alguna razón se llegara a romper el cable tractor.
Tipos de montacargas
Los montacargas están clasificados por el tipo de ruedas o llantas, su motor (eléctrico o de combustión) y por el uso que se le dé. En ese sentido, estos son:
- Montacargas de tipo 1 o pesado: Este se caracteriza por ser eléctrico y tener peso en su carrocería, lo cual actúa como contrapeso. En este, el operador se ubica en el interior del montacargas.
- Montacargas de tipo 2 o para pasillos angostos: Su diseño hace que la posición de los controles y, por ende, del operador sea al frente. De esta manera es transportado a una ubicación elevada.
- Montacargas de tipo 3 o levantamiento bajo: Este diseño tiene horquillas y una plataforma. En él, el operador suele estar ubicado en la parte trasera, aunque hay otros en los que el operador debe estar de pie. Este es un montacargas manual. Además de estas características, los montacargas manuales son mucho más baratos que otros modelos, además no requieren mantenimiento constantemente.
- Montacargas de tipo 4 o de contrapeso trasero: En estos el operador se ubica en una cabina, sentado. Este modelo es impulsado por combustión interna, bien sea con gasolina, diésel o gas propano. Tiene llantas sólidas.
- Montacargas de tipo 5 o de llantas neumáticas: Este, con un modelo similar al de cuarto tipo, solo se diferencia por las llantas neumáticas.
Partes de un montacargas
Las partes que tenga un montacargas van a variar en función del modelo que se tenga, sin embargo, todos suelen tener un contrapeso, horquillas o uñas, un mástil, ruedas directrices, ruedas motrices y una rejilla para el apoyo de la carga.
Ventajas y desventajas de los montacargas eléctricos:
Su principal ventaja es que, al no emanar humos o gases son más amigables con el medio ambiente, no hacen ruido y tienen bajo costo operacional y de mantenimiento. Su desventaja es que requieren de baterías de repuesto para que funcionen de forma prolongada, las cuales pueden llegar a ser muy costosas, sin contar que su trepabilidad no es tan eficiente como la de los modelos a combustión.
Ventajas y desventajas de los montacargas de combustión:
Estos modelos gozan de una gran autonomía de trabajo, tienen mejor trepabilidad que los montacargas eléctricos, su desempeño es superior en espacios abiertos y el desgaste que tienen es inferior al de sus homólogos eléctricos. Sus desventajas radican en la gran emisión de monóxido de carbono; un agente contaminante que, en grandes cantidades, puede ser tóxico. Adicionalmente, son muy ruidosos.