Con el fin de incorporar este residuo de la construcción a la economía circular, una empresa de la Región de Los Lagos creó este modelo de reciclaje que nació de un concurso de innovación sustentable y que hoy apunta a escalarlo a todo Chile.
Reducir los desechos que genera la industria de la construcción y otras industrias, y mitigar su impacto al medioambiente fue el principal objetivo tras la creación de Poliestirec, empresa oriunda de la Región de Los Lagos, que decidió dar el salto produciendo a gran escala pinturas y recubrimientos fabricados a partir de los descartes de plumavit y posicionarlos a nivel país como una materia prima de vanguardia y de alta calidad dentro de la misma industria, una de las mayores consumidoras de estos productos que se aplican en la etapa de terminaciones y sellado de sus proyectos inmobiliarios.
De acuerdo con Antonio Vial, gerente General de Poliestirec, el poliestireno expandido o plumavit, es un derivado del plástico que se usa transversalmente como aislante en las construcciones y que, a pesar de ser un excelente material −debido a su bajo costo y muy buenas propiedades térmicas−, es el mayor pasivo ambiental a nivel mundial, porque su reutilización o reciclaje es escaso o de muy alto costo. “Esto provoca que termine en vertederos o contaminando el mar, lagos, ríos y humedales de nuestra Región de Los Lagos y con esta iniciativa evitamos que lleguen a nuestros cuerpos de agua”, señala.
La empresa Triciclos Chile estima que en nuestro país se desechan cerca de 360 millones de toneladas de plumavit al año y se estima que 60 millones provienen de labores industriales. Sin un debido tratamiento, puede permanecer hasta mil años en el planeta debido a que no es biodegradable. “Es cierto que su reciclaje es complejo porque requiere maquinaria de gran escala y aún no existe en Chile esa capacidad como para entregar una garantía de que se va a reciclar «, comenta Álvaro Mujica, gerente de Operaciones de Triciclos.
Sin embargo, a través de su modelo de recolección, gestión y tratamiento, Poliestirec ha alcanzado la capacidad de reciclar 4 toneladas y media al mes de este residuo, que proviene mayormente de obras de construcción y, en una menor parte, del sector residencial y acuícola. Su fábrica, ubicada en Puerto Varas, puede transformar estos 4.500 kilos en 42.800 litros/mes de pinturas y revestimientos.
Inmobiliaria Altas Cumbres, reconocido desarrollador en el sur de nuestro país, fue el primer actor de la industria en incorporar los productos Poliestirec en proyectos residenciales completos. “Nos pareció interesante sumarnos como empresa a la economía circular con un material que antes de consideraba una pérdida para la empresa y, por otra parte, acceder a productos que han demostrado ser de tan buena calidad como los convencionales, pero con mejor resistencia a la humedad y durabilidad, que es precisamente lo que buscamos para las viviendas que desarrollamos en el sur, donde las condiciones climáticas son más extremas”, explica Enrique Loeser, gerente comercial de la inmobiliaria.
En una primera etapa, Altas Cumbres adquirió 1.500 litros de pintura Poliestirec para cubrir 150.000 m2 en sus proyectos inmobiliarios ubicados en Villarrica, Puerto Varas, Puerto Montt y Punta Arenas, “y seguiremos utilizándolas en futuros desarrollos. Es un buen ejemplo a seguir por el resto de los actores de la industria para el manejo responsable de este residuo”, agrega el ejecutivo.
Otra de las características de las pinturas de Poliestirec es que son a base al agua, que es el tipo más utilizado en la industria, en variedades como látex, esmalte, antihongos, impermeabilizantes elastoméricos y vitrificante, entre otros. Todos sus productos y procesos están pensados para resguardar la seguridad de su personal de planta y aplicadores o clientes finales, utilizando químicos amigables con el medioambiente recomendados por el Organismo Chem XXI. Además, cuentan con calidad certificada por el Instituto de Investigaciones y Control del Ejército (IDIC).
“Si bien nuestro impacto directo está por ahora en la Economía Circular de la Región de Los Lagos, tenemos la capacidad de producir y vender los productos a lo largo de todo Chile. Además, la gestión de residuos la podemos hacer con empresas medianas, grandes, instituciones públicas, recicladores locales, entre otros, a los cuales les podemos emitir un certificado de disposición responsable que indica la cantidad de emisiones de carbono reducidas con esta acción. En este sentido, nuestra principal meta es crecer y romper el paradigma de que la construcción no puede contribuir al medioambiente”, concluye Antonio Vial de Poliestirec.